lunes, 3 de octubre de 2016

El Mundial de la Vergüenza



Acallados los ecos de la legítima victoria española, su nuevo campeonato mundial femenino de Hockey sobre Patines y de la desafortunada semifinal argentina que dejó afuera de la pelea por la Copa, este análisis busca poner en tema lo extradeportivo que se vio en Iquique, Chile.  

Como primera medida el estadio de “juguete”, no resiste análisis alguno. Cuando en el mundo, todos los países que pretenden organizar citas ecuménicas presentas maquetas de estadios fastuosos, que cuestan millones de dólares para superar la sede anterior, Iquique presentó una carpa de “media-sombra” altamente inflamable, con tribunas desvencijadas, camarines hechos con módulos de durlock y baños químicos. Cualquier estadio techado de San Juan era mucha más sede para un mundial. Ni hablar del Aldo Cantoni.

No voy a analizar, en esta nota, los motivos que llevaron a la ciudad chilena a presentar semejante barbaridad como sede de un mundial, pero sí hay que resaltar que tiempo han tenido para construir un estadio, al menos, de mil personas y que esté acorde al evento en cuestión.


Y resalto “como sede de un mundial” porque no era un simple campeonato local o regional, cualquier cancha resultaría cómoda, en  una competición planetaria donde llegarían los mejores referentes de la disciplina, acostumbrados a otros estadios, presentar una “tela de media-sombra” era,  mínimo, inapropiado e irresponsable.

La vergüenza era propia, también. Muchos iquiqueños señalaron a este periodista que ese estadio daría que hablar, una vez terminado el mundial, porque la organización recibió muchos recursos para construir algo “serio” y presentar una edificación responsable.

En cuanto al trabajo de prensa, la organización no entregaba los tradicionales “dossier” con informaciones de los partidos, datos de goleadores o estadísticas del evento. El encargado, Coke González, solo trabajaba para la pagina del mundial y era solo el. No disponía de un equipo de periodistas que lo ayudara a su tarea, o que estuviera al lado de los reporteros  para solucionar un eventual inconveniente. Si bien personalmente, González era correcto, su trabajo no lucía por la distancia que imponía con la prensa asistente.

En fín, fuimos a la bella Iquique pensando que sería, en lo organizativo, un desafío a superar, con situaciones que pusieran en serio riesgo a los próximos organizadores de los mundiales, pero en lo bueno, en lo extraordinario, en lo superador. Nos encontramos con un estadio de tela y con un trabajo de los organizadores de los años 60, porque en los 70, los periodistas ya disponían, al menos, de teléfonos para la comunicación. En Iquique, ni eso.

Como amante del Hockey sobre Patines hay que olvidar rápidamente este mundial y ponerse a trabajar inmediatamente en el próximo, en China, que está a menos de un año. Y en lo dirigencial, a nivel mundial, pensar que esta experiencia chilena no debe repetirse. No se debe permitir este tipo de situaciones en un evento que debe superarse, para bien, mundial tras mundial. Organizar otro encuentro como el del 2016, sería ponerle la lápida a esta disciplina que apasiona a tantos, y llevaría a pensar que es cierto  que el hockey sobre patines femenino, está, como dice el genial Cacho Castaña en su tema “Voy camino a los 50”, cerca del punto final. 

2 comentarios:

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  2. Ni qué hablar del tema de los ingresos. Da mucho a la especulación sobre el manejo amañado de esta, ya que, sin haberse conocido la programación se abrieron las "inscripciones" que además no salieron a tiempo sino que salían día tras día. Esto daba para pensar que de acuerdo a los resultados chilenos iban acomodando los ingresos ya que si de verdad fuera un sorteo, este listado debió ser público desde el día uno. Las graderías, eran algo increíble, creo que sufríamos más los que íbamos a ver los partidos que las mismas deportistas que sufrían el rigor de los partidos, totalmente incómodas, y cero estéticas, es más vi un señor que sufrió un accidente en estas pues la distancia entre escalones era un precipicio. Dios quiera el señor no se gangrene con su herida. Con el tema que los niños entraban sin boletería, había días en que no le cabía un alfiler a ese estadio, unos días se permitía estar en una tribuna, al otro día no, en otros te forzaban a estar en un punto, cómo habrá sido el grado de desorganización, que el día que Chile pierde con Francia, las deportistas se quedaron sin su tribuna asignada ya que la llenaron de público incluso permitiendo que se sentaran en los escalones pequeños (escalones de acceso y evacuación) cosa TOTALMENTE IRRESPONSABLE teniendo en cuenta que como muchos lo sabemos y en su video promocional anunciaron, estábamos en una zona completamente telúrica (hasta los organismos de socorro estaban cómodamente sentados en la tribuna. En mi caso, gracias al delegado y su gestión, logró hacernos entrar a las 5 personas que veníamos desde Colombia, pues por parte del tal listado (dudoso por donde se le mire) no hubiéramos podido entrar sino los 3 primeros días no solo en nuestro caso sino en el de países que sería aún peor teniendo en cuenta el millaje para llegar allá, como los europeos. En el caso del primer partido contra Portugal, los organismos de socorro no podrían haber sido más displicentes. DOS NIÑAS tuvieron golpes fuertes, casi no llegan, las sacaron con cero protocolo, sin inmovilizadores de cuello (aún habiendo sufridos golpes lumbares y en cabeza), solo tenían una manta... Mejor dicho otro tema para revisar. Lo que mencionan de la cubierta del "estadio" es cierto, además en los partidos de jornada matutina, esto no ayudaba para nada, primero el reflejo del sol en una pista tan nueva y por ende brillante, y segundo, la temperatura se multiplicaba. Bastante para tener en cuenta, corregir y no permitir a futuro.

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